Hay una creencia general de que los niños no deben ir al dentista porque mudaran sus dientes y tendrán otros nuevos más fuertes y duraderos. Esto es falso, ya que cuando los niños crecen comen distintos alimentos y todos dejan partículas en sus bocas que pueden provocar caries u otras enfermedades. Por eso la salud dental en niños debe ser inculcada desde una edad temprana y deben ser llevados periódicamente al dentista para una revisión de sus dientes, sin importar que sean de leche.
Una buena rutina de limpieza bucal en la etapa de la niñez, puede ser la base para una rutina dental efectiva durante toda la vida.
¿Cuándo deben llevarse a los niños al odontólogo?
Los padres siempre preguntan “¿a qué edad debo llevar a mi hijo al dentista?” Los especialistas recomiendan que los niños deberían ir al odontólogo a partir de la edad de un año o dentro de los primeros seis meses después de la aparición los primeros dientes. Los dientes primarios usualmente empiezan a crecer alrededor de los 6 meses de edad.
Según los dentistas, es muy importante el mantenimiento de los dientes de leche en su lugar hasta que se suelten de forma natural. Los dientes primarios son importantes por muchos factores, incluyendo los siguientes:
- Ayudan a los niños a masticar de manera correcta para mantener una buena alimentación.
- Participación en el proceso y desarrollo del habla.
- Ayudan a guardar el espacio para los dientes fijos.
- Fomentan una sonrisa saludable que ayudará a los niños a sentirse bien sobre su aspecto y sobre cómo se ven físicamente.
Muchas personas no entienden la gran importancia que representan los dientes de leche en los niños para su salud bucal de toda la vida.
Los padres y los niños, necesitan tener una mayor educación dental y aprender prácticas esenciales, como las técnicas correctas para el cepillado y emplear el hilo dental, que proporcionaran una buena salud dental en niños y en la etapa adulta.
La primera consulta con el odontólogo, es una gran oportunidad para que los padres puedan aprender de qué manera pueden cuidar mejor de los dientes de sus hijos.
Pautas para una buena salud dental en los niños
- Los niños deben cepillarse los dientes al menos dos veces al día y preferiblemente después de cada comida, esa es una de las mejores formas de prevención de las caries.
Pueden emplear un cepillo eléctrico con cabeza rotatoria, ya que hará una mejor limpieza dental que los cepillos manuales. Así los niños tendrán una limpieza más meticulosa.
- Hay que asegurarse de que el dentífrico usado por la familia tenga flúor, ya que los estudios han comprobado que es efectivo en la prevención de la caries.
- Se debe preguntar al odontólogo sobre el uso de selladores dentales para los dientes de los niños. Algunos centros dentales recomiendan los selladores para los niños en edad escolar.
- Los niños deben usar hilo dental tan pronto como sea posible, ya que es la forma más efectiva de eliminación de las partículas de comida y de la placa dental que queda entre los dientes. Para una mejor protección contra las caries, deben usar el hilo dental al menos una o dos veces al día.
- Reducir el consumo de bebidas y comidas que contienen azúcar también es importante para la prevención de las caries y una buena higiene bucal en los niños.
La importancia de la odontología en los niños
Llevar de manera periódica a los niños al odontólogo es muy importante para que tengan una buena salud en sus dientes y para que desarrollen desde pequeños unos buenos hábitos dentales.
La importancia de llevar a los niños al odontólogo radica en que los padres pueden aprender junto a los niños y repetir en casa todo lo que aprendieron en la consulta y así los pequeños se sentirán apoyados y desarrollaran mejores hábitos y rutinas de limpieza bucal más rápidamente.
También se le ira el miedo de ir a las consultas odontológicas y se sentirán menos ansiosos en cada visita.